El gobierno marroquí ha calificado las acusaciones de “falsas” e “absurdas”
El gobierno argelino, mediante un comunicado oficial, informó ayer del asesinato de tres civiles por un “bárbaro bombardeo” del ejército marroquí, en la ruta que une la ciudad argelina de Uargla y la capital de Mauritania, Nuakchott. El presidente de Argelia, Abdelmajid Tebboune, afirmó que el ataque “no quedará impune”.
“Varios elementos apuntan a la participación de las fuerzas de ocupación marroquíes en el Sáhara Occidental en el cobarde asesinato”, señalaba el documento argelino. Las autoridades no ofrecieron prueba alguna de quién fue el culpable de los hechos, pero el tono del escrito era abiertamente hostil hacia el vecino en el Magreb. Los tres argelinos realizaban un “movimiento natural de intercambios comerciales entre la gente de la región”, concluye el comunicado.
La presidencia argelina sostuvo que se investiga en profundidad el “acto innoble” para aclarar las circunstancias que lo rodean. “Rabat nunca será arrastrado a una espiral de violencia y desestabilización regional”, aseguró una fuente marroquí según la agencia France Presse (AFP). “Si Argelia quiere la guerra, Marruecos no la quiere”, añadió.
Argelia y Marruecos mantienen sus fronteras cerradas desde 1994 por el conflicto del Sáhara Occidental. La tensión del conflicto se incrementó en noviembre de 2020 cuando el Frente Polisario decretó la ruptura del alto el fuego con Marruecos, que se había firmado ante la ONU en 1991. Y volvió a agravarse a partir del 10 de diciembre, cuando el expresidente estadounidense, Donald Trump, reconoció la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental, a cambio de que el gobierno marroquí estableciese relaciones con Israel.
Comments